Nuevo año, nuevo todo...

Hay ocasiones en las que uno comienza un nuevo proyecto con muchos ánimos y expectativas, como si no tuviera tiempo o energías que dedicar a los malos pensamientos o al pesimismo. Bueno, eso no está pasando con el año que recién se inicia. No sé si será porque generalmente los primeros días del año son normalmente grises y fríos, nada propensos a generar alegría o entusiasmo; o porque tal vez la misma incertidumbre de paso a la apatía y a la total indolencia, a la falta de ánimo y a la flojera.

Este año se presenta difícil, ya que es electoral, y como tal, nos va a enfrentar con campañas repetitivas, demagógicas y poco creíbles. Va a estar difícil ver con qué novedades nos convencerán los candidatos, ya que si todo 2011 estuvieron de gira por aquí y por acá, o en FILs metiendo la pata, ahora veremos qué tan creativos se pondrán para demostrar que son mejores que sus antecesores y que el partido que representan será nuestra salvación. ¿Será el fin del PAN, después del "milagro" de Fox y de las "luchas contra el crimen" de Calderón, que nos tienen hartos y desesperanzados? ¿Habrá llegado la hora en en que el Peje de veras se ponga cuerdo y nos sorprenda con sus propuestas?, ¿o de veras estaremos preparados para que una mujer nos gobierne?

También va a ser un año difícil porque envejeceremos un poco más: donde antes no había tantas canas, ahora saldrán más; en donde aparentemente la piel se sentía tersa, ahora habrá arrugas; donde antes no se "colgaba" anda, habrá flacidez... ¿estaré así porque me acerco a los cuarenta y ni siquiera me dí cuenta en qué momento pasé de los 36 a los casi 38, que me llegaron tan de repente?

Nuestros hijos seguirán creciendo. Dejarán de ser niñitos para convertirse en adolescentes que dejarán de hacernos tantas preguntas y nos verán menos como sus héroes. Ya extrañaremos la eterna preguntadera, o el que se quieran sentar en nuestras piernas mientras estamos sentados frente a la computadora, o viendo la tele. Cosas como "¡claro que es cierto, me lo dijo mamá!", o "mamá, ¿verdad que eres la mejor de todo el mundo?", dejarán de decirse tan a menudo, para dar paso a cuestiones "más profundas" y más parecidas a "¿tú qué sabes de eso? Nunca entiendes nada"...

Siempre he querido escribir un libro. Después de haber leído a muchos autores, me parecía que teniendo las ideas, sólo era cuestión de madurarlas, anotarlas en un papelito, e irlas perfeccionando hasta que solitas hicieran párrafos completos, y luego una trama entera. Pero creo que no va a ser tan fácil. Lo mío más bien es leer los que ya existen y recomendarlos. Y yo creo que este año tampoco voy a poder intentar siquiera anotar mis pensamientos como siempre he querido.

No es que anden diciendo por ahí que este año se nos acaba el mundo, pero siento como que estamos viviendo tan a la carrera y llevados por la inercia, que ni siquiera pudimos saborear con gusto la Navidad y las fiestas decembrinas como Dios manda. Tanto planear, decorar, preparar, cocinar, reunirse, abrazarse y demás, para que la cena termine en cuestión de horas, y al día siguiente se respire un aire de abandono y apatía. Pasa como con las bodas... lo que tanto tarda uno en preparar, termina en un solo día y la vida sigue como si nada. Será a lo mejor que como Navidad cayó en domingo, se juntaron dos cosas: día festivo y la aburrición de domingo por la tarde.

Sigo pensando en que enero es el peor mes del año... todavía no dice nada de cómo será el futuro, pero nos enfrenta a la dura realidad de que más allá de todo festejo, la vida sigue su curso y no espera a nadie.

Sin embargo, como es natural en el ser humano, siempre tendemos a hacer castillos en el aire; a imaginarnos lo que haremos y con qué lo haremos; a gastarnos lo que todavía no hemos ganado, y a idealizar nuestra realidad en los próximos meses.

Hace un rato ya venía pensando en lo que quisiera que mis hijos hagan este año, "ahora que tengas ocho años...", y sin embargo, no sé ni lo que haremos mañana o pasado.

Creo que hasta este punto ya he divagado lo suficiente. Sólo quise entrar a escribir unas cuantas líneas, porque hace mucho que no escribía nada y me van a cancelar mi blog.

Ojalá pueda seguir publicando las ideas que se me vengan a la mente, aunque nadie mas que yo las lea y me autocritique después... lo único bueno es que si no me gusto, me borro y listo.

Felicidades, Divina, en este año que comienza. No te adelantes al futuro, con que vayas viviendo un día a la vez es suficiente. Tal vez puedas planear una que otra cosa, pero lo mejor será que disfrutes la vida como se te presenta, y te dejes sorprender de vez en cuando. Si has de planear algo, que sean tus clases y los fines de semana... lo demás se irá dando solo.

Salud.

2 comments:

  • gina | 12:13 a.m.

    ya tienes una lectora mas burris...
    ah! y por cierto.... bajele al acelere en navidad,, que para eso son esos dias.. :D
    cuando nos vemos por cierto?

  • Divinaflor | 5:33 p.m.

    Jaja... Bueno, es que estas fechas también son para andar de grinch, no? Pos tú di rana y yo salto... pero acuérdate de que ya me has dejado plantada, "o llegas super temprano y luego te vas".